El encuentro se llevó a cabo en Colonia Barón, con la participación de los directores de hospitales de General San Martín, Toay, General Pico, y el responsable del hospital local. Aunque el legislador de la UCR no asumió compromisos específicos en respuesta a las peticiones recibidas, se comprometió a “discutir el tema”.
“Explicó que va a discutir y analizar dentro del bloque si le permiten tratar el asunto en detalle, con la intención de abogar por el ‘no’ dentro del interbloque y evaluar sus opciones”, comentaron fuentes de Salud Pública.
Los médicos que asistieron al encuentro forman parte de un grupo de más de 500 profesionales que están protestando ante la posibilidad de tener que pagar impuestos sobre las ganancias generadas por las guardias que realizan.
En este contexto, el próximo lunes tienen previsto reunirse con la senadora Victoria Huala (Juntos por el Cambio) y el senador Daniel Bensusán (Unión por la Patria). Para el martes, se prevé una conferencia de prensa en la que se ofrecerá “un resumen de las reuniones y las observaciones clave”.
El viernes, los profesionales de la salud pública dieron a conocer un documento donde instan a los senadores de La Pampa a votar en contra del regreso del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, dentro del marco de la Ley Bases y el Paquete Fiscal, que ya fue aprobado por la Cámara de Diputados de la Nación.
“El restablecimiento de este impuesto no solo afecta nuestros salarios, sino que también es perjudicial para toda la sociedad pampeana. Basta recordar que en el pasado tuvimos dificultades para mantener el servicio de guardias médicas debido a esta carga impositiva”, afirmaron en el documento.
“Nuestro salario consta de un sueldo básico y de ingresos adicionales por guardias. Estos adicionales no solo incrementan nuestros ingresos, sino que también sostienen servicios esenciales como las guardias médicas. Si el impuesto se restaura, afectará tanto a los profesionales como a la economía local, ya que un salario más bajo resulta en menor consumo interno”, añadieron.
Los profesionales subrayaron que su principal preocupación es que esta situación podría afectar al sistema de salud en su conjunto: con el impuesto sobre las ganancias, menos trabajadores estarían dispuestos a realizar guardias. “Esto también podría exponer a los trabajadores de la salud a situaciones potencialmente violentas debido a un aumento de la demanda no resuelta”, concluyeron.