Los números fríos indican que para el Gobierno nacional no hace distinciones al momento de retacear recursos a las provincias. Un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso referido al segundo trimestre de 2024, confirma que La Pampa perdió de Coparticipación Federal un 17,4% en términos reales, o sea por sobre la inflación, mientras que la caída promedio del conjunto de las provincias fue del 18,7%.
El gobierno de La Pampa advirtió en reiteradas oportunidades que el recorte en el envío de fondos no distingue entre las provincias que pueden tener una visión crítica del modelo, de las que han optado por avalar sin reparos las decisiones del Gobierno nacional.
Estas conclusiones se desprenden de un informa elaborado por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) en el que certifica la continuidad del ajuste que aplica Casa Rosada durante el segundo semestre de 2024 y que impacta a todas las provincias.
Para Casa Rosada no hay provincias amigas o enemigas, todas, sin excepción, ven como como se desfinancian sus políticas públicas, principalmente las relacionadas con la salud, la educación y la alimentación, a lo que se le suma la paralización de la obra pública.
Transferencias totales
El informe analiza el desplome de las transferencias totales a las provincias, que se componen por las automáticas y las no automáticas.
En términos totales La Pampa perdió un 17,4%, mientras que el promedio de caída del total de las provincias se ubicó en el 18.7%.
El dato significativo es que todas las provincias perdieron. A modo de ejemplos se puede mencionar que Neuquén, recibió un 20,7%menos; La Rioja perdió un 23,7% y a Córdoba le sacaron el 15,6% de recursos.
Si se desglosan los datos se desprende que las automáticas ajustadas por inflación, tuvieron una detracción de 12,2%.
La mayor caída en términos reales es el 50,1 % en los giros vinculados a leyes especiales.
Las transferencias no automáticas mostraron una caída nominal del %52 %, lo que se traduce en una contracción real del 87,1%.
Transferencias automáticas
Incluyen la Coparticipación, asignaciones específicas y otras transferencias vinculadas a convenios determinados.
La Pampa perdió un 11,5% en total, pero no fue la única provincia que perdió. A modo de ejemplo se puede citar a Córdoba que recibió un 11,8% menos; Chubut con un 12,1 % menos; Corrientes con un 12,2 % menos. En definitiva, todas las provincias perdieron, incluida la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, aunque esta es la que se vio menos perjudicada, ya que solo le sacaron el 8,8% de coparticipación.
Transferencias no automáticas
Revisten una importancia fundamental en la vida de las provincias porque son las vinculadas en forma directa a la prestación de servicios esenciales: educación, salud, infraestructura para saneamiento (agua potable, cloacas).
Más allá de la asignación estratégica de estos recursos el Gobierno nacional prácticamente los eliminó. La Pampa recibió un 88 % menos por el Fondo de Incentivo Docente; no recibió un peso de los que se destinan para Desarrollo Regional, mientras que en 2023 se le habían asignado $300 millones de pesos.
En lo que a salud se refiere se giraron un 28,3% menos de recursos que en el mismo periodo de 20023 y para el financiamiento y desarrollo de infraestructura para el saneamiento (obras de agua potable, cloacas, etc.) el recorte fue del 97,5%.
Vale aclarar que las demás provincias se vieron afectadas negativamente en porcentajes similares y en algunos casos algo peores.