El ministro de Obras Públicas de La Pampa, Alfredo Intronati, expresó un fuerte rechazo a la decisión del Gobierno nacional de sumar dos nuevas cabinas de peaje en la Ruta Nacional 5, en el tramo que une Santa Rosa con Luján, sin incluir obras que mejoren la infraestructura vial. El funcionario remarcó que el planteo provincial no es contra el sistema de peajes en general, sino contra el cobro de una tarifa sin contraprestación.

La iniciativa impulsada por el Ministerio de Economía de la Nación incorpora estaciones de cobro en Lonquimay y en la zona de Gorostiaga, que se sumarían a las ya existentes en Trenque Lauquen, 9 de Julio y Olivera. Según explicó Intronati, durante las audiencias públicas realizadas en Junín y San Nicolás, la provincia advirtió que cualquier ampliación del esquema debía acompañarse de obras que mejoraran la seguridad vial y garantizaran un servicio acorde.

El ministro señaló que las banquinas de la traza están “muy descalzadas” y que la empresa concesionaria debería, como mínimo, brindar el mantenimiento básico antes de avanzar con nuevos puntos de cobro. “No estamos en contra de los peajes, pero sí de cobrar por un servicio que no se presta”, afirmó en diálogo con Radio Noticias 99.5. Según indicó, el pliego contempla únicamente la reparación de un sector a la altura de Trenque Lauquen, sin obras adicionales para la RN 5 pese a los pedidos de la provincia y de organizaciones como Estrellas Amarillas.

Intronati sostuvo además que, como usuario, no se opondría a pagar un peaje si la ruta ofreciera condiciones adecuadas: demarcación correcta, banquinas firmes y calzada sin deformaciones. Sin embargo, advirtió que la situación actual está lejos de ese estándar.

El ministro también adelantó que esta semana mantendrá su primera reunión con el secretario de Transporte de la Nación, Luis Pierrini. En ese encuentro, planteará la propuesta pampeana para que el Estado nacional transfiera a la provincia el mantenimiento de 600 kilómetros de rutas estratégicas, además de la situación crítica de trazas como la 151, la 143 y la 35, que no fueron incluidas en las concesiones impulsadas por el Gobierno nacional y permanecen sin planificación ni recursos.

Por último, Intronati aportó datos sobre el costo de una obra largamente reclamada: la autovía de la Ruta 5. Detalló que la construcción de una doble vía requiere una inversión cercana a los 2.500 millones de pesos por kilómetro, equivalente —según graficó— al costo de construir “una escuela por kilómetro”. En ese sentido, afirmó que desarrollar 84 kilómetros de autovía demandaría una inversión similar a la de edificar 84 establecimientos educativos, lo que da dimensión del esfuerzo económico necesario.