En los mismos se pudieron rescatar más de 30 ejemplares de fauna nativa productos de la tenencia ilegal y de la captura y comercialización de dicha fauna.
Entre los ejemplares se destacan halcones utilizados para la práctica de cetrería, los cuales deben estar registrados, aves canoras como cabecitas negras, corbatitas y jilgueros, martinetas copetonas entre otras especies prohibidas.
Habiendo analizado el estado sanitario de las mismas, en su mayoría pudieron regresar a su hábitat natural.