Trabajadores de la seguridad privada realizaron una protesta ayer por la mañana frente a los galpones de Ferroexpreso Pampeano, ubicados sobre calle 10 entre 19 y 21, en reclamo por la reincorporación de ocho vigiladores despedidos sin previo aviso ni indemnización.
La medida incluyó el bloqueo del acceso a las instalaciones y fue encabezada por referentes del gremio Upsap (Unión del Personal de Seguridad de la República Argentina). En diálogo con los medios, el delegado regional Sebastián Saavedra explicó que el conflicto surgió tras el cambio de empresa de seguridad, que dejó a ocho trabajadores fuera de sus puestos.
“El conflicto es que han dejado a ocho vigiladores despedidos sin previo aviso y sin indemnización. Ferroexpreso contrató a otra firma, G4S, en lugar de Securión, y nosotros pedimos que esa nueva empresa reincorpore a los vigiladores cesanteados”, expresó.
Saavedra también aclaró que no se trató de un recorte de personal, ya que ingresaron diez nuevos vigiladores. “No sabemos si son trabajadores de General Pico, porque G4S suele traer personal de Córdoba y Mendoza. Acá hay ocho familias que se quedan sin ingresos, y varios de ellos tenían más de diez años en sus puestos”, agregó.
El gremialista adelantó que intentarán entablar un diálogo con el gerente general de G4S, pero que hasta el momento no han recibido respuestas. En caso de no obtener una solución favorable, advirtió que se profundizarán las medidas de fuerza.