La ministra de Educación de La Pampa, Marcela Feuerschvenger, manifestó su preocupación por la falta de actualización en los presupuestos nacionales destinados a la educación. Según detalló, los fondos que la provincia recibirá del Gobierno Nacional este año apenas representarán el 0,6% del presupuesto educativo local, manteniendo los valores de 2023 sin ajustes para 2024 ni 2025.
Un apoyo nacional mínimo
La Pampa destinará una importante inversión a la educación, pero el respaldo financiero de la Nación es mínimo: sólo 2.800 millones de pesos, cifra que no llega al 1% del total invertido por la provincia. A pesar de esta situación, programas nacionales como Comedores Escolares, Hora Más, el Instituto Nacional de Educación Física (INEF) y el Programa de Alfabetización siguen funcionando con fondos provinciales, debido a los retrasos en las transferencias nacionales correspondientes a enero y febrero.
“Los salarios de estos programas ya fueron pagados por la provincia para evitar afectar a los docentes y estudiantes”, explicó Feuerschvenger.
Falta de diálogo en el Consejo Federal
La ministra señaló que el Consejo Federal de Educación ya no cumple el rol de espacio de discusión como en gestiones anteriores. “Somos pocos los que planteamos la realidad de las provincias, mientras que la mayoría de los ministros opta por el silencio”, denunció.
En este contexto, Feuerschvenger mencionó la reciente aprobación de un documento de reconocimiento de saberes para la educación de jóvenes y adultos. “El texto original, que había sido elaborado en 2011 pero nunca aprobado, incluía principios de justicia social. Sin embargo, la versión enviada desde la Casa Rosada llegó muy modificada y tuvimos que intervenir para preservar su espíritu original”, aseguró.
Educación pública y equidad
Ante un informe que expone desigualdades entre escuelas públicas y privadas a nivel nacional, la ministra destacó que en La Pampa la realidad es diferente. “El 83% de la población estudia en escuelas estatales y, en los últimos dos años, la matrícula de colegios públicos creció un 8%. Además, 13 instituciones privadas de oferta única pasaron a la esfera estatal”, detalló.
Los colegios privados en la provincia también reciben apoyo estatal, lo que permite sostener un sistema educativo más equitativo.
Uso responsable del celular en las aulas
El debate sobre la utilización de dispositivos móviles en las escuelas sigue vigente. En La Pampa, la regulación de su uso comenzó en 2017, pero la pandemia modificó el escenario, consolidando al celular como una herramienta pedagógica. “En lugar de prohibirlo, apostamos a la responsabilidad y el acompañamiento. Trabajamos en acuerdos escolares de convivencia, sobre todo en secundaria, donde las dinámicas en el aula son más complejas”, explicó la ministra.
Libros y tecnología: un equilibrio necesario
Lejos de ver a los libros y las pantallas como rivales, la provincia apuesta a su complementariedad. “Seguimos promoviendo la lectura y el uso de bibliotecas, sin desconocer el rol de la tecnología en la educación actual. La inteligencia artificial ya es parte de nuestras vidas y los docentes deben estar preparados para integrarla de manera responsable”, afirmó Feuerschvenger.
Horarios extendidos para mejorar la calidad educativa
Actualmente, la mayoría de las instituciones educativas pampeanas han ampliado su jornada escolar. “Tenemos diferentes modalidades: jornada simple, jornada completa, extensión horaria de 5 horas, escuelas hogar y la incorporación del programa provincial Vértice Educativo, que absorbió todas las políticas nacionales previas”, explicó la funcionaria.
De acuerdo con un relevamiento reciente, la provincia cuenta con 21 escuelas hogar, 44 con jornada completa, 45 con jornada extendida y 201 establecimientos que han incorporado la ampliación horaria mediante Vértice Educativo, distribuidos entre nivel primario, secundario e inicial.
Conclusión
A pesar de la falta de financiamiento nacional, La Pampa sigue apostando a una educación equitativa y de calidad. “Nos enfrentamos a desafíos constantes, pero estamos convencidos de que con políticas de cuidado, acuerdos de convivencia y un trabajo conjunto con las familias, podremos seguir garantizando el derecho a la educación para todos los pampeanos”, concluyó la ministra Feuerschvenger.