Al grito de “¡Viva la Patria!”, la plaza San Martín de Santa Rosa fue escenario de una multitudinaria celebración por el Día de la Tradición. El festejo, impulsado por el grupo folklórico El Entrevero con el acompañamiento de la municipalidad, reunió a cientos de familias que disfrutaron de una jornada con música, baile, tortas fritas y mates compartidos.
Bajo el nombre “Peña de Halloween y Tradición”, la convocatoria generó curiosidad en redes sociales: los organizadores aparecieron disfrazados en las publicaciones y propusieron además llevar un juguete para regalar en Navidad. Sin embargo, en la plaza no hubo máscaras ni disfraces, sino gauchos y paisanas con pañuelos, bombachas, polleras y alpargatas.
Desde las 18, los asistentes fueron llegando con reposeras y mates para disfrutar de los espectáculos en La Glorieta. Sobre el escenario se presentaron El Entrevero, La Reservada, Agustín Mansilla —quien representará a La Pampa en el próximo festival de Cosquín— y distintos ballets folklóricos. El payador César Darío Ulloa cerró su presentación con un vibrante “¡Viva la Patria!” que despertó aplausos y emoción entre el público. Luego, los músicos repartieron tortas fritas y caramelos.
El director de Cultura, Walter Llanson, explicó que la idea del evento nació de forma espontánea: “Los chicos vieron el movimiento que generó Halloween y propusieron hacer algo por el Día de la Tradición. Se sumaron artistas autoconvocados y bailarines, y la convocatoria fue impresionante”.
Por su parte, Francisco Terrón, integrante de El Entrevero, destacó el espíritu del encuentro: “Fue una forma de atraer a los jóvenes, de mantener viva la cultura popular. Lo del nombre fue una broma para generar interés, pero la esencia fue celebrar lo nuestro”.
Cada 10 de noviembre, Argentina conmemora el Día de la Tradición en homenaje al nacimiento de José Hernández, autor del Martín Fierro, obra que retrata la vida del gaucho y sus valores de honor, libertad y justicia. La fecha fue establecida en 1939 por ley provincial y extendida a todo el país en 1975.
Así, entre música criolla, mate y baile, Santa Rosa volvió a rendir homenaje a su identidad cultural y a las raíces que unen al pueblo argentino bajo una misma consigna: mantener viva la tradición.

