La jueza de audiencia santarroseña, Alejandra Flavia Ongaro, condenó hoy a un hombre de 24 años a seis años de prisión por ser autor de los delitos de abuso sexual agravado con acceso carnal y abuso sexual simple aprovechando la convivencia previa con una persona menor de 18 años.
Las víctimas fueron la hermana de 11 años de su ex pareja y la hija de ella, de 8, respectivamente; y los hechos fueron valorados en el marco de las leyes 26485 de Protección Integral contra las Mujeres, y 26061 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes. La magistrada dispuso la detención inmediata del imputado una vez que la sentencia quede firme.
“En ambos casos se acreditó el ultraje sexual que el acusado ejerció sobre estas niñas, quienes claramente por sus edades no pudieron prestar un consentimiento libre y válido”, indicó Ongaro. Y agregó: “la conducta descripta fue desplegada en los dos casos en forma dolosa, ello es queriendo el resultado y conociendo de forma inequívoca la situación de indefensión y vulnerabilidad en la que se encontraban las niñas (…); lo que le permitió actuar con total impunidad a sabiendas que no podían ofrecer resistencia a las agresiones a las que las sometía”.
La resolución fue dictada a partir de un acuerdo de juicio abreviado presentado conjuntamente por la fiscala Verónica Ferrero, la defensora oficial María Silvina Blanco Gómez y el propio agresor, quien aceptó su culpabilidad. Las madres de las niñas, al ser informadas sobre su alcance, también prestaron su conformidad.
En la otra causa, su colega del Tribunal de Audiencia, Carlos Alberto Besi, tras el juicio oral, condenó a un hombre de 48 años a seis años de prisión, por la autoría del delito de abuso sexual con acceso carnal, en el marco de la ley 26485.
A su vez, le mantuvo la restricción absoluta de acercamiento y contacto con la víctima –su hermana del corazón, ya que fue criada por la madre del agresor– hasta la finalización de proceso, por existir peligro de fuga; dispuso, como medida sustitutiva de la prisión preventiva, la obligación al imputado de presentarse ante el Ministerio Público Fiscal cada 15 días; y ordenó su detención cuando el fallo quede firme.
Besi, con las pruebas reunidas durante el debate, dio por probado que el acusado abusó sexualmente de la mujer de 26 años en el interior de la vivienda habitada por ambos, cuando la mujer se hallaba entredormida en una habitación.
Durante los alegatos, el fiscal Cristian Casais pidió una pena de seis años; mientras que el defensor particular, Gastón Gómez, solicitó lisa y llanamente la absolución del acusado por entender que existió consentimiento y, subsidiariamente, que fuera absuelto por el beneficio de la duda.