El anuncio del swap con Estados Unidos no generó el “efecto tranquilizador” que el Gobierno esperaba y ahora los mercados enfrentan un nuevo foco de incertidumbre: los bancos convocados por el Tesoro norteamericano para colaborar en el rescate económico de la gestión libertaria reclaman garantías para avanzar con el préstamo. Según un informe de The Wall Street Journal, las entidades financieras solicitaron a Scott Bessent precisiones sobre cómo se asegurará que la Argentina devuelva un crédito bancario de 20 mil millones de dólares.
El paquete de ayuda diseñado por la administración de Donald Trump asciende a 40 mil millones de dólares. La mitad corresponde al swap ya anunciado, destinado a reforzar políticamente a La Libertad Avanza de cara a las elecciones legislativas del domingo. Los otros 20 mil millones provendrían del sector privado, con participación de JP Morgan, Bank of America, Goldman Sachs y Citigroup. Sin embargo, los directivos de estas entidades manifestaron su preocupación ante la posibilidad de no recuperar los fondos.
Reclamo de garantías
De acuerdo con The Wall Street Journal, las fuentes cercanas al conglomerado bancario “están buscando algún tipo de garantía o compromiso para asegurarse de que recuperarán su dinero”. Trump, en declaraciones recientes, fue tajante al referirse a la situación económica argentina: “Argentina no tiene dinero, no tienen nada, están luchando para sobrevivir”, afirmó. También dejó en claro que el apoyo financiero estará condicionado al resultado electoral: “Si Milei gana, estaremos cerca; si no, nos vamos”, advirtió.
Los banqueros esperan directivas del Tesoro estadounidense y quieren saber “qué garantías podría ofrecer Argentina” en caso de una derrota electoral de La Libertad Avanza, o si el propio Washington respaldará la línea de crédito. “Los bancos consideran que no pueden actuar sin el aval del Tesoro. La línea de crédito aún no se ha concretado y podría no materializarse si no se resuelve la cuestión de las garantías”, advirtió el informe.
Desconfianza por el historial argentino
Las entidades financieras fundamentaron sus dudas en el comportamiento económico del país durante las últimas tres décadas. “Argentina debe al FMI casi 60.000 millones de dólares, más que cualquier otro país del mundo”, recordó el diario estadounidense.
En ese contexto, los bancos cuestionaron el plan de respaldo impulsado por Trump para fortalecer el peso y aumentar las reservas en dólares. Consideran riesgoso intercambiar 20 mil millones de dólares por pesos argentinos sin garantías concretas. “Los riesgos de estas operaciones son inusualmente grandes. Si el peso se deprecia, el Tesoro se quedaría con activos que han perdido valor”, explicó Brad Setser, exsubsecretario adjunto del Tesoro durante la administración de Barack Obama.
Intentos de calma oficial
Scott Bessent sostuvo que la Casa Blanca está “utilizando las herramientas del Tesoro, rápidas y eficaces, para estabilizar a la Argentina”, y definió la medida como “un puente hacia un futuro económico mejor, no un rescate”.
Por su parte, el presidente Javier Milei señaló: “En caso de no poder salir al mercado de capitales porque el riesgo país sigue siendo muy alto, utilizaremos la línea de swap para afrontar los pagos de 2026. Es tomar deuda para pagar deuda, y ese es su objetivo: dar seguridad a quienes invierten en Argentina”.