El gobernador de Chubut Ignacio Torres, amenazó con interrumpir desde el próximo miércoles la salida de petróleo y gas de la provincia si el Ministerio de Economía de la Nación “insiste con retener de manera indebida la mitad de la coparticipación” que le corresponde a su distrito, ante lo cual el Gobierno nacional advirtió que una medida de ese tipo sería “absolutamente ilegal”.
“Si para el miércoles no nos quitan la pata de encima, no va a salir un barril más de petróleo de Chubut para la Argentina. Y ahí te quiero ver”, desafió Torres, quien está al frente de la segunda cuenca hidrocarburífera del país. Frente a la advertencia, el presidente Javier Milei salió al cruce y a través de su cuenta en la red social X le advirtió que va a cometer un delito previsto en el artículo 194 del Código Penal, y lo calificó de “degenerado fiscal”.
¿Qué puede suceder con el abastecimiento de combustibles si efectivamente se corta el envío de crudo desde esa provincia? Al respecto, el exdirector Nacional de Refinación y Comercialización de la Secretaría de Energía de la Nación Ignacio Barousse, afirma que la teoría indica que Argentina tiene en promedio aproximadamente 15 días de existencia de petróleo crudo (en yacimientos, refinerías y plantas de almacenaje) y otros 25 días de productos terminados (naftas y gasoil).
“Sin producción de petróleo y sin importaciones, el país en un extremo podría soportar con sus existencias totales la demanda de 40 días de consumo”, detalló.
El exfuncionario explica que Argentina procesa un volumen cercano a 18.000 m3/d de crudo Escalante (Chubut) y habitualmente las existencias suman un total de 550.000 m3. “Es decir que teóricamente se podría estar 30 días procesando las existencias de ese crudo en caso de pararse la producción”, enfatiza Barousse.
No obstante alerta que si se detiene el suministro a las refinerías desde la terminal de almacenaje Caleta Córdova (Chubut), la cantidad de días que podrían transcurrir sin afectar la producción se reduce notablemente, porque la mitad de las existencias están en ese complejo industrial y en los yacimientos.
Por su parte, el exsecretario de Recursos Hidrocarburíferos José Luis Sureda, opinó en primer lugar que “el gobernador Torres no tiene facultades para interrumpir la producción”. Y si bien evalúa que “nada va a pasar porque sería demasiado grave”, advirtió que si por este motivo las refinerías debieran parar “sería una hecatombe”.