El Fondo Monetario Internacional informó este viernes que llegó a un acuerdo con el equipo económico para la revisión de las metas correspondientes al tercer trimestre del programa que mantiene nuestro país con el organismo.
Lo acordado está sujeto a la aprobación del Directorio Ejecutivo del FMI, que se espera se reúna este mes. Una vez completada la revisión, Argentina tendrá acceso a alrededor de u$s6.000 millones, de los cuales u$s 4.500 millones corresponden a Derechos Especiales de Giro (DEG).
“El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas llegaron a un acuerdo a nivel de personal técnico sobre un marco macroeconómico actualizado y las políticas asociadas necesarias para completar la tercera revisión bajo el acuerdo SAF de 30 meses de Argentina”, destacó un comunicado del organismo.
Las negociaciones, que incluyeron reuniones presenciales y virtuales, tuvieron lugar entre un equipo del FMI, encabezado por Luis Cubeddu, Director Adjunto del Departamento del Hemisferio Occidental y Ashvin Ahuja, Jefe de Misión para Argentina, y las autoridades argentinas.
“La revisión se centró en evaluar el progreso reciente en la implementación del programa y en llegar a entendimientos sobre políticas para fortalecer aún más la estabilidad macroeconómica en el marco de un contexto más desafiante”, continúa el texto.
Durante los encuentros, se acordó que los objetivos clave del programa como el déficit fiscal primario y las reservas internacionales netas permanecerían sin cambios durante el resto de 2022 y 2023. Además, se discutió sobre la necesidad de que las políticas se adapten según sea necesario en caso de que se materialicen riesgos externos e internos.
Desde el organismo también destacaron que a pesar de los desafíos planteados por problemas globales como la guerra en Ucrania, el Gobierno argentino logró cumplir con todas “las metas cuantitativas de desempeño hasta fines de septiembre de 2022, incluido el déficit fiscal primario debido a fuertes controles de gastos y acciones para mejorar la focalización de los subsidios y la asistencia social”.
También celebraron el reciente acuerdo de reestructuración de deuda con el Club de París, así como la mejora en los índices de inflación y en la balanza comercial “en gran parte debido a una desaceleración apropiada de la demanda interna y las importaciones”.
Sin embargo, advirtieron que aún las condiciones macroeconómicas son “frágiles” y recomendaron continuar con el proceso de consolidación fiscal “que prevé una reducción del déficit fiscal primario del 2,5 % del PIB en 2022 al 1,9 % del PIB en 2023”.
“Esto debe estar respaldado por esfuerzos para seguir movilizando ingresos, fortalecer controles de gastos, y mejorar de manera oportuna la focalización de los subsidios y la asistencia social, al tiempo que proporciona espacio para el gasto social y de infraestructura prioritario”, apuntaron desde el FMI.