Expectativa por otra posible suba de las tasas de interés por parte del Banco Central

La implementación del denominado dólar Qatar, que suma un 25% más de percepción impositiva para consumos con tarjeta en moneda extranjera superiores a los u$s300 en el lapso de un mes, y la publicación del dato de inflación de septiembre del 6,2% que dio a conocer el Indec marcaron la agenda económica de esta semana. […]

La implementación del denominado dólar Qatar, que suma un 25% más de percepción impositiva para consumos con tarjeta en moneda extranjera superiores a los u$s300 en el lapso de un mes, y la publicación del dato de inflación de septiembre del 6,2% que dio a conocer el Indec marcaron la agenda económica de esta semana.

Lo que viene será una importante reunión el lunes en la Secretaría de Comercio con representantes de empresas alimenticias y de consumo masivo, la publicación de los datos de las canastas de pobreza e indigencia por parte del Indec el miércoles, y otra posible suba de tasas por parte del Banco Central de la República Argentina (BCRA).

Si bien la inflación fue un poco más baja de lo que se esperaba para septiembre, en el BCRA consideran que igualmente está en un nivel muy alto y no quieren que los pesos excedentes de la gente se vayan al dólar. Por tal motivo, se especula con que seguirán subiendo la tasa de interés.

“Es una medida defensiva con costos importantes, uno de ellos sobre el nivel de actividad, porque afecta al crédito, al consumo y a la producción. Van poniendo parches por acá y por allá para evitar que explote la situación”, sostuvo el periodista de C5N especialista en economía David Cufré en Minuto a Minuto.

Actualmente, la tasa referencial se sitúa en el 75% nominal anual, equivalente al 107% efectivo anual, con una inflación proyectada de alrededor del 100%. En caso de concretarse, sería el décimo incremento en lo que va de 2022.

El objetivo de la suba de tasas, algo que cuenta con el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI), es incentivar el ahorro en moneda local, aspirar los pesos inyectados en la economía y aproximar la tasa al ritmo de depreciación del tipo de cambio oficial.