Familiares de víctimas de siniestros viales de todo el país han manifestado su profunda preocupación ante la posibilidad de cierre o fusión de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), una decisión que podría significar un grave retroceso en las políticas de prevención y control del tránsito en Argentina.
La ANSV, creada en 2008 mediante la Ley 26.363, ha sido un pilar fundamental en la reducción de la siniestralidad vial a través de la implementación de normativas, controles y campañas de concientización. Su posible eliminación pone en riesgo avances clave como la Licencia Nacional de Conducir, la unificación del control de antecedentes, el sistema de scoring, la coordinación de operativos y la Línea 149 opción 2, que brinda asistencia a víctimas y familiares de siniestros viales en todo el país.
“Mueren cerca de 15 mil argentinos por año en accidentes de tránsito”, afirmó el presidente Javier Milei en su discurso de asunción, reconociendo la gravedad del problema. Sin embargo, el posible desmantelamiento de la ANSV atenta contra la continuidad de políticas públicas efectivas que han salvado vidas. La desarticulación de este organismo podría generar un aumento en la cantidad de muertes evitables y la falta de un marco regulador uniforme en el país.
A su vez, los familiares de víctimas remarcan que la ANSV cuenta con financiamiento propio en más del 80% de su patrimonio desde su creación, a través de contribuciones de aseguradoras, lo que garantiza su independencia y capacidad operativa sin generar costos adicionales al Estado.
Por todo lo expuesto, familiares y referentes de la seguridad vial han solicitado una audiencia con el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Dr. Federico Sturzenegger, con el objetivo de exponer sus inquietudes y plantear la necesidad de fortalecer, en lugar de desmantelar, las políticas públicas en materia vial.
Desde la Fundación Estrellas Amarillas reafirmamos nuestro compromiso con la construcción de una cultura vial responsable y exigimos que la seguridad vial siga siendo una prioridad en la agenda gubernamental.