La causa de “Chocolate” dio un giro este sábado cuándo el propio Julio Rigau se entregó en la comisaría 2° de La Plata y se puso a disposición de la Justicia. El puntero del PJ había sido sorprendido en un cajero automático con 48 tarjetas de débito de empleados de la Legislatura bonaerense.
A “Chocolate” lo buscaban desde el viernes, cuándo, tras recobrar vigencia la orden de detención, no se lo encontró en su domicilio. En ese momento se emitió una órden de captura.
Rigau se presentó junto a su abogado, y también con una nota mediante la cual solicitó su eximición de prisión. “Tomé conocimiento en la fecha a través de mis defensores respecto de la orden de detención que pesa en mi contra, y de la denegatoria de eximición de prisión a los fines de estar a derecho me presento espontáneamente”, dice el escrito que presentó Rigau esta tarde.
Rigau fue detenido hace un mes mientras sacaba dinero de un cajero del Banco Provincia de La Plata, aunque por orden de la Cámara de Apelaciones fue puesto en libertad. Luego, Casación anuló ese fallo y este viernes la Justicia había comenzado a buscarlo. Ese día la Policía bonaerense se presentó en la casa de Rigau, en La Plata, para detenerlo pero el puntero del PJ bonaerense, que había sido encontrado vaciando tarjetas de débito de supuestos empleados de la Cámara de Diputados bonaerense, no se encontraba en el domicilio.
“Fueron a detenerlo pero sin allanamiento. Lo ordenó la Fiscalía porque tiene el impulso de la acción penal y denegaron la eximición de prisión”, dijeron fuentes judiciales a NA. En tanto, la fiscal Bettina Lacki determinó que el viernes 20 se concrete la demorada apertura del celular Samsung modelo SM- G532M gris de “Chocolate” Rigau, una de las principales medidas de prueba que impulsó.
La fiscal busca averiguar cómo se movieron los fondos millonarios en efectivo que pasaron por Rigau y determinar posibles complicidades de las autoridades, ya sean de un espacio político o administrativas de la Cámara de Diputados de la provincia. También determinar de qué trabajan los supuestos empleados que percibían 580.000 pesos mensuales y le daban la tarjeta a Rigau para que les cobre el sueldo.