Durante el acto, el presidente de Energía Argentina S.A. (Enarsa), Agustín Gerez, destacó que se trataba de “un día histórico” con un proyecto que “transformará la economía de la Argentina”.
Cinco empresas y consorcios empresarios presentaron este viernes ofertas técnico-económicas en la licitación para la construcción de la primera etapa del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner y obras complementarias, que la ministra de Economía, Silvina Batakis, consideró una obra “fundamental para los próximos 30 años”.
Los oferentes fueron BTU; el consorcio conformado por Techint y Sacde; TGS; Esuco y la Unión Transitoria de Empresas (UTE) Víctor Contreras-Contreras Hermanos.
El acto licitatorio fue encabezado por el presidente de Energía Argentina S.A. (Enarsa), Agustín Gerez, quien puntualizó que se trataba de “un día histórico” con un proyecto que “transformará la economía de la Argentina”.
De acuerdo con fuentes oficiales, para el invierno de 2023, antes de la ejecución de las obras de compresión previstas para este segmento, el gasoducto ya aportará 11.000.000 m3/día de nueva capacidad
Por su parte, el secretario de Energía, Darío Martínez, resaltó que Enarsa “viene cumpliendo los plazos tal cual lo establecido” y que, una vez concluido, el gasoducto “va a ubicar a la Argentina en un camino de más seguridad energética, con la posibilidad de tener factibilidad de gas en todas las provincias, sustituir importaciones y ahorrar divisas”.
Batakis –que al igual que Martínez se conectó al acto por vía remota- celebró “el trabajo en equipo” tanto con Enarsa como con “el sector empresario, que es el que va a generar los puestos de trabajo y el crecimiento económico”.
“En la Argentina necesitamos una matriz productiva más diversa, más compleja, y esta obra es fundamental para los próximos 30 años de la Argentina”, destacó la titular del Palacio de Hacienda, quien remarcó que “la energía es el costo de los costos en materia empresaria”, porque “sin energía no hay posibilidades de que podamos tener radicación de empresas”.
Por su parte, Gerez sostuvo que la construcción del gasoducto es una estrategia fruto de “la decisión de Alberto y Cristina”, en referencia al presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El Gasoducto Presidente Néstor Kirchner fue destacado en varios oportunidades por funcionarios del Gobierno nacional como la obra de infraestructura más importante de los últimos 40 años, y permitirá el transporte del gas no convencional generado en el área de Vaca Muerta (Neuquén) con los principales centros de consumo del país
Al respecto, señaló que “desde aquel DNU (en alusión al DNU 76/2022 del 11 de febrero) comenzamos a trabajar sin cesar”.
En ese sentido, indicó que se cuenta con “los estudios de impacto ambiental terminados” y que se consiguieron “los caños en un estado de confusión por el conflicto internacional de público conocimiento”.
Con el compromiso de contar con la primera etapa del gasoducto en funcionamiento para el invierno de 2023, el titular de Enarsa remarcó que “el cronograma es muy ajustado” y representa “un desafío”.
Asimismo, aseguró que “la instrucción de Alberto con el DNU conlleva una confianza plena en nuestros equipos”, y destacó que a Enarsa “ser un acto central de este proceso nos llena de honor y de orgullo”.
El Gasoducto Presidente Néstor Kirchner fue destacado en varios oportunidades por funcionarios del Gobierno nacional como la obra de infraestructura más importante de los últimos 40 años, y permitirá el transporte del gas no convencional generado en el área de Vaca Muerta (Neuquén) con los principales centros de consumo del país.
Mediante una extensión de 467 kilómetros, la segunda etapa permitirá llegar con gas natural a San Jerónimo (sur de la provincia de Santa Fe), sumando otros 17 millones de m3/día y abriendo la posibilidad de abastecer a grandes ejes urbanos e industrias del centro y norte del país
De esta forma, se prevé que con su finalización no sólo aumentará la provisión de gas a usuarios industriales, comerciales y residenciales, sino que también se reducirán de modo sustancial los gastos de importación de combustible, lo que redundará en un significativo ahorro fiscal.
La obra se construirá en dos etapas: la primera conectará el parque industrial Tratayen, emplazado en Vaca Muerta, con la ciudad bonaerense de Salliqueló, cubriendo una distancia de 558 kilómetros y expandiendo el suministro de gas en 22 millones de metros cúbicos por día al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
De acuerdo con fuentes oficiales, para el invierno de 2023, antes de la ejecución de las obras de compresión previstas para este segmento, el gasoducto ya aportará 11.000.000 m3/día de nueva capacidad.
Mediante una extensión de 467 kilómetros, la segunda etapa permitirá llegar con gas natural a San Jerónimo (sur de la provincia de Santa Fe), sumando otros 17 millones de m3/día y abriendo la posibilidad de abastecer a grandes ejes urbanos e industrias del centro y norte del país, como también la oportunidad de exportar los excedentes a Brasil y Chile.