El panorama de la economía estadounidense mejora y la política de tasas de la Fed podría tender a la baja. ¿Qué efecto tiene esa tendencia en los bonos locales?
Los inversores de todo el mundo tienen la mirada puesta en la política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). El índice subyacente de gastos de consumo personal en el 2,9%. Se trata de un dato mejor de lo esperado y la primera vez que el indicador cayó debajo del 3% desde que el banco central inició su alza de tasas agresiva, pero el mercado contempla que, quizás, el organismo mantenga el índice sin cambios tras la próxima reunión, que será en marzo. ¿Cómo impacta esto en la dinámica de la renta fija argentina?
La mejora de las variables que se venía viendo hacía pensar que la inflación se habrá enfriado lo suficiente en marzo como para que el banco central de ese país aplique una reducción de tasas, pero, en los últimos días esa posibilidad se ve un poco más lejana. Los operadores ahora consideran que un primer recorte de tasas de la Fed podría llegar en abril o mayo recién.
Para el especialista en mercados Marcelo Bastante, “el hecho de que esta semana se conoció que el PBI estadounidense creció más de lo esperado y que los balances de las compañías públicas en algunos casos también presentan datos reales mejores que los pronosticados generan un contexto económico positivo” y señala que, eso, sumado a la expectativa de que pueda comenzarse un proceso de reducción de tasas de la FED, puede incidir favorablemente en la renta fija local.
Cómo incide la política de tasas de la Fed en la renta fija argentina
Y es que, tal como describe el analista de F2 Soluciones Financieras Andrés Reschini, “la tasa que fija la Fed marca el piso de rendimientos en Estados Unidos y afecta a los bonos del Tesoro americano“, que son considerados libre de riesgo, por lo que explica que, si la Fed decide mantener las tasas altas habrá más flujo de capitales que vayan hacia títulos norteamericanos y, por ende, menos para la renta fija argentina.
Si se da esa tendencia, se generarán mayores rendimientos de los títulos estadounidenses y, en consecuencia, menor valor de los locales. Si la Fed decidiese bajar los tipos, sucedería lo contrario: un mayor flujo de capitales iría hacia los de mercados emergentes y eso podría beneficiar a la renta fija local.
En la misma línea apunta Salvador Vitelli, de Romano Group, cuando señala que “al subir la tasa de referencia de Estados Unidos, es como si prendiera una aspiradora de dólares hacia bonos estadounidenses, que son considerados instrumentos sin riesgo”. Eso genera compresión de los flujos de países emergentes, por lo que, en la medida en que la flexibilización de la tasa de política monetaria comience a darse, y vaya hacia una tendencia bajista, los mercados emergentes podrían beneficiarse y, entre ellos, se encuentra la Argentina.
El factor argentino será clave
Sin embargo, Vitelli advierte que “si bien toda baja de tasas facilita el ingreso de capitales, el país tiene que hacer lo suyo para la seducción de esos fondos”. Y considera que, para ello, es clave que se permita la libre salida de capitales de Argentina para que entren también.
Por otro lado, Bastante señala que “el mercado local está muy a la expectativa de cómo evolucione el tratamiento del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y la ley ómnibus“. Para él, estos 2 aspectos tienen mayor incidencia que el contexto global en este momento, aunque resalta que la tendencia internacional para los próximos meses parece que será favorable para los bonos argentinos.
Así, el panorama se presenta como positivo si mejoran las condiciones para los emergentes. Y es que Vitelli anticipa que, de cara a las perspectivas futuras, “si baja la tasa de la Fed y Argentina mejora las condiciones para los inversores, podemos empezar a ver una influencia positiva para el mercado de capitales y la economía local”.