El fabricante de neumáticos Fate anunció un “ajuste de su estructura” a raíz de la “pérdida de competitividad exportadora” y la “caída de demanda del mercado interno”.
El fabricante de neumáticos Fate anunció un “ajuste de su estructura” a raíz de la “pérdida de competitividad exportadora” y la “caída de demanda del mercado interno”, por la cual despedirá a 97 trabajadores de su planta de San Fernando.
Fate enumeró entre los “factores negativos” a los que la empresa se encuentra “expuesta” la “abusiva sobrecarga impositiva, restricciones cambiarias para el pago de insumos del exterior, deficiente infraestructura, sobrecostos derivados de la legislación del trabajo, baja productividad laboral, ausentismo, elevada conflictividad gremial”.
“Estos sobrecostos distorsivos no se encuentran presentes en otros países en los que se desarrolla la producción de neumáticos. Como efecto de estas asimetrías, el costo final de los productos que manufactura la empresa es muy superior al de neumáticos fabricados en otros países. La consecuencia es una brecha de competitividad insalvable que torna imposible continuar exportando los productos que la empresa fabrica en la Argentina a mercados en los que nuestra marca está presente desde hace décadas”, sostuvo en un comunicado.
Fate denunció que además existen “escandalosas asimetrías en el comercio exterior” por los subsidios que otros países otorgan a la industria del neumático para exportar a la Argentina. “A la inversa, un fabricante en la Argentina carece de esquemas comparables y, por encima de esto, debe afrontar sobrecostos y pagar derechos de exportación (único caso en el mundo)”, remarcó.
El comunicado de Fate:
Como consecuencia de una sostenida pérdida de competitividad exportadora, FATE S.A.I.C.I. informa que está llevando adelante acciones para adecuar sus operaciones al contexto del negocio.
Conforme se ha venido informando al personal, a las autoridades, y al sindicato SUTNA, la actividad de la empresa se encuentra expuesta a factores muy negativos que incrementan severamente el costo de su producción: abusiva sobrecarga impositiva, restricciones cambiarias para el pago de insumos del exterior, deficiente infraestructura, sobrecostos derivados de la legislación del trabajo, baja productividad laboral, ausentismo, elevada conflictividad gremial, sólo por mencionar algunos.
Estos sobrecostos distorsivos no se encuentran presentes en otros países en los que se desarrolla la producción de neumáticos. Como efecto de estas asimetrías, el costo final de los productos que manufactura la empresa es muy superior al de neumáticos fabricados en otros países. La consecuencia es una brecha de competitividad insalvable que torna imposible continuar exportando los productos que la empresa fabrica en la Argentina a mercados en los que nuestra marca está presente desde hace décadas.
Además, existen escandalosas asimetrías en el comercio exterior: otros países brindan subsidios e incentivos a la producción de neumáticos que se exportan a la Argentina. A la inversa, un fabricante en la Argentina carece de esquemas comparables y, por encima de esto, debe afrontar sobrecostos y pagar derechos de exportación (único caso en el mundo).
Finalmente, a diferencia de otros mercados maduros, nuestro mercado interno es débil en controles y mecanismos de defensa comercial normalmente aplicados en el mundo. Por ello la Argentina resulta muy permeable al ingreso de neumáticos importados en condiciones que se enmarcan en el comercio desleal, vulnerando principios básicos que rigen el comercio internacional y la libre competencia.
Pese a estas dificultades, FATE ha realizado importantes inversiones destinadas a la modernización tecnológica de su planta y productos, en el afán de lograr mejoras de costos y competitividad que, por las causas referidas, no pudieron ser alcanzadas.
En tales condiciones, no existiendo otros destinos para la producción exportable, y frente a la caída de demanda del mercado interno, resulta imprescindible adecuar el modelo operativo de la planta industrial al contexto descripto.
Confiamos en que todos los involucrados puedan encarar este proceso con madurez y responsabilidad, en un marco constructivo. Continuaremos brindando los productos y servicios de calidad que nuestros clientes y consumidores nos requieren, como lo hacemos desde hace 80 años.