La caída de la actividad económica se traduce en menos importaciones. Pero el déficit comercial sigue alto porque bajan las exportaciones.
Las empresas de autopartes nucleadas en la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC) no ocultan su preocupación por el impacto que está teniendo la caída de la actividad económica en esta industria.
Esto se refleja en la marcada baja en la importación de insumos y también en una menor performance exportadora. Como resultado de todo esto, el déficit comercial del sector se sigue acumulando.
Frente a esta situación, Juan Cantarella, Presidente Ejecutivo de AFAC, aprovechó la difusión de las últimas estadísticas sectoriales para pedir al gobierno nacional la instrumentación de medidas que ayuden a mejorar la competitividad de toda la cadena de valor automotriz. Además, dejó en claro que el régimen del RIGI no llega a atender las necesidades de todos los eslabones de esta actividad.
“Los desequilibrios comerciales del sector autopartista requieren un abordaje desde múltiples puntos de vista, abarcando tanto decisiones estratégicas por parte de toda la cadena de valor automotriz como también la necesidad de avanzar muy rápidamente en una agenda de mejora de la competitividad”, sostuvo Cantarella.
Y añadió: “Esto es esencial en una cadena productiva como la automotriz donde la mayor parte de la producción depende de la exportación, que en este caso sería del 61,7%”.
En la misma línea, el directivo de la cámara autopartista sostuvo: “La velocidad con la que se logre mejorar la competitividad y el desarrollo industrial del país debe ir en paralelo, como mínimo, con las medidas de apertura del comercio internacional”.
En este punto, remarcó que “un marco estable y previsible como en el que se está avanzando es condición fundamental para generar inversiones. Pero al RIGI y demás regímenes deben sumarse instrumentos que integren a la totalidad de la cadena de valor automotriz“, aclaró Cantarella.
Las cifras del déficit comercial autopartista
Los planteos de los autopartistas se basan en datos concretos. Según el último informe “Comercio Exterior de Autopartes” que elabora AFAC, correspondiente a los primeros ocho meses de 2024, la balanza comercial de autopartes presentó en ese lapso un déficit de u$s5.703 millones. El saldo se redujo un 12,8% respecto al mismo periodo de 2023, “explicado en parte por el impacto de la caída en el nivel de actividad sobre las importaciones”, destacó el estudio.
Así, el detalle del comercio exterior autopartista hasta agosto de este año muestra que las exportaciones cayeron un 2,7%, cerrando el periodo analizado en un valor de u$s864 millones.
En tanto, las importaciones de autopartes se redujeron durante enero-agosto de 2024 un 11,6% interanual, alcanzando los u$s6.567 millones.
Al analizar la producción de vehículos, durante el mismo periodo, el informe detalla que se fabricaron 312.822 unidades, un 23,4% menos respecto a 2023. Esta caída fue acompañada por las importaciones de autopartes, pero en una proporción bastante menos pronunciada, explica.
Entre los principales rubros comercializados, “Transmisión” registró un déficit de u$s1.244 millones, por u$s1.556 millones de importaciones y u$s311 millones en exportaciones. Luego, “Componentes de motor” tuvo un déficit de u$s910 millones, con u$s1.040 millones de importaciones y u$s130 millones de exportaciones.
Por último, el rubro “Eléctrico” acumuló un déficit de u$s901 millones, por u$s930 millones de importaciones y u$s28 millones en exportaciones.
El principal socio comercial de la Argentina en el sector siguió siendo Brasil, con un déficit comercial de u$s1.602 millones por importaciones por u$s2.167 millones y exportaciones por u$s566 millones.
Detrás se ubicó el bloque de la Unión Europea, con un saldo negativo de u$s1.240 millones, con u$s1.315 millones de importaciones y u$s75 millones de exportaciones.
En tercer lugar aparece Tailandia, con un déficit de u$s733 millones por importaciones por un monto de u$s733 millones y exportaciones por u$s524.967).
Japón tuvo un déficit comercial de u$s622 millones, con importaciones por u$s622 millones y exportaciones por u$s410.016. Con Estados Unidos se acumuló un déficit de u$s422 millones, con u$s468 millones de importaciones y u$s45 millones de exportaciones.