Luego de meses de conflicto, la cooperativa láctea llegó a un acuerdo con el gremio. Está procesando 450.000 litros diarios y aspira alcanzar los 600.000 hacia fin de año.
La cooperativa láctea SanCor parece haber encontrado una luz de esperanza al final del túnel. Es que luego de haber llegado a un acuerdo con el gremio ATILRA, que nuclea a la mayoría de sus trabajadores, retomó la producción en casi todas sus plantas y lentamente sus productos están volviendo a las góndolas, en paralelo sigue latente la posibilidad del desembarco de un socio que aporte fondos frescos para recuperar el terreno perdido en los últimos años.
Por estas horas los líderes de la compañía láctea se muestran mucho más esperanzados que meses atrás, fundamentalmente porque sus plantas de producción volvieron a operar con una cierta normalidad luego del duro enfrentamiento que incluyó cese de actividades y hasta la amenaza de un paro nacional de todo el sector, con sus trabajadores nucleados en ATILRA.
La realidad es que la empresa sigue envuelta en una compleja situación, acumula millonarias deudas y necesita capital de trabajo para volver a ser competitiva en un sector que hoy evidencia una fuerte caída de la demanda. Según detallaron fuentes de la firma a Ámbito, están en conversaciones con posibles inversores para sacar a flote a la compañía, pero lo cierto es que todavía no hay nada cerrado.
Desde el sector detallan que la llegada de un inversor en la cooperativa láctea puede ser un salvavidas, pero antes de eso debería sanear en parte su estructura y justamente su recientemente enfrentamiento con ATILRA la llevó prácticamente a la extinción.
Durante los últimos 10 meses la planta de producción de SanCor ubicada en Sunchales estuvo prácticamente paralizada mientas que sus otros establecimientos trabajaban a media máquina, eso generó que paulatinamente los productos más reconocidos de la empresa como los quesos desaparecieran de las góndolas de los grandes centros urbanos y ese terreno que perdió quedó en manos de otras empresas que hoy se muestran altamente competitivas.
Otra cuestión fundamental es que la paz que parece haber encontrado con el gremio puede ser de corto alcance porque la empresa todavía debe salarios y cargas sociales, por lo que de no encontrar fondos frescos en un lapso de tiempo breve, otra vez estaría en problemas.
Por lo pronto, la empresa láctea ya está procesando alrededor de 450.000 litros diarios de leche, en total son alrededor de 150 productores los que están entregando materia prima, el objetivo es alcanzar los 600.000 litros diarios hacia fin de año, para así iniciar el 2025 con un piso mejor que el de este año.
Otra cuestión fundamental es que la empresa necesita con urgencia capital de trabajo no solo para comprar materia prima, sino también para concretar inversiones en sus plantas de producción, que han sufrido diversos problemas estructurales luego de meses de conflicto con el gremio lácteo. Una de las posibilidades que se barajan a esta altura sería vender activos, incluso en el sector se menciona que hay tres plantas de producción de SanCor que hoy están con cartel de venta.
De cualquier manera, desde la cooperativa prefieren mirar para adelante y proyectan un 2025 mejor que este 2024, se esperanzan con la llegada de fondos frescos y apuestan también a que sus productos vuelvan a recuperar el terreno perdido.